SANTO DOMINGO. Tres de cada diez personas sufren de hipertensión y no lo saben. Aquellos que sí lo saben, alrededor de 7 de cada 10, no saben controlarla y los resultados casi siempre son fatales. Pero sí puede tratarse. La medicación, una vez es diagnosticada, controla en gran parte el problema, pero no las causas. ¿Qué más puede hacer por usted mismo?
Siga el " DASH" :
Estas siglas corresponden en inglés a " Dietary Approach to Stop Hipertensión". Algo así como "Medidas Nutricionales para Frenar la Hipertensión". En español no suena tan bonito, pero funciona. ¿Los ingredientes? Alimentos bajos en grasa saturada, colesterol y grasas totales, con énfasis en frutas, vegetales, granos integrales y lácteos desnatados. Los resultados comienzan a apreciarse en solo dos semanas.
Cuidado con la sal: En estudios de seguimiento, se vio que los mejores resultados en términos de disminución de la hipertensión se consiguieron cuando los pacientes que seguían la dieta DASH limitaron su consumo de sodio (sal) a 1500 mg por día, o su equivalente a menos de una cucharada. Si usted está echando el pleito contra la hipertensión, ¡lea las etiquetas! La sal puede ocultarse en cualquier producto. Sospeche de los enlatados, las picaderas, las sopas preparadas, productos cárnicos...
Aunque no lleve DASH de forma estricta, existen otras medidas que puede aplicar.
Consuma frutas frescas y vegetales. Al menos cinco raciones por día.
Frutas y vegetales ayudarán a mantener saludables sus arterias. Enfóquese especialmente en guineos, papas, melón cantalupe, ciruelas y pasas, por su contenido en potasio. Este mineral ayuda a mantener el balance de sal y fluido corporal en las medidas correctas. Si logra aumentar su consumo de potasio al mismo tiempo que reduce la sal, los resultados serán mucho mejores.
Dígale sí a la soya: Los que consumen soya o algunos de sus familiares (habichuelas, legumbres, nueces, semillas) tienden a tener valores mucho menores de presión arterial que aquellos que obtienen sus proteínas de fuentes animales, como las carnes.
Tómele cariño a la avena: deje de considerarla comida para niños y comience su día con una buena taza. Fría o caliente, como más le guste. La avena tiene una habilidad especial para reducir la hipertensión y los niveles de colesterol y sus maravillas siguen sorprendiendo a los científicos.
Limite el alcohol. Casi todos los " buenos" consumidores de alcohol son hipertensos. Si su médico todavía no se lo ha prohibido, limite su consumo alcohólico a un trago por día si es mujer y a dos, si es hombre. Un trago equivale a 12 onzas de cerveza, 5 onzas de vino o media onza de whisky. ¡No más!
Amor por el chocolate. No todas son malas noticias... aún puede comer chocolate. Una barra pequeña de chocolate negro, rico en flavonoides y antioxidantes que reducen la hipertensión. No se lleve del gusto a chocolate amargo (perdón por la ironía, no puedo evitarlo...), porque engorda!
Otras medidas complementarias incluyen ejercitarse al menos tres veces por semana, media hora cada vez; conseguir la compañía de una mascota, aprender a meditar, practicar un hobby y buscar la forma de limitar el estrés en su vida.
Seguro que a este punto ha identificado algunos factores que lo están afectando. Una lectura de presión arterial a tiempo puede salvar su vida o mejorarla. Qué está esperando?
Para mayor información sobre el DASH, consulte en www.nhlbi.nih.gov/health/public/heart/hbp/dash himilcetejada@hotmail.com
Siga el " DASH" :
Estas siglas corresponden en inglés a " Dietary Approach to Stop Hipertensión". Algo así como "Medidas Nutricionales para Frenar la Hipertensión". En español no suena tan bonito, pero funciona. ¿Los ingredientes? Alimentos bajos en grasa saturada, colesterol y grasas totales, con énfasis en frutas, vegetales, granos integrales y lácteos desnatados. Los resultados comienzan a apreciarse en solo dos semanas.
Cuidado con la sal: En estudios de seguimiento, se vio que los mejores resultados en términos de disminución de la hipertensión se consiguieron cuando los pacientes que seguían la dieta DASH limitaron su consumo de sodio (sal) a 1500 mg por día, o su equivalente a menos de una cucharada. Si usted está echando el pleito contra la hipertensión, ¡lea las etiquetas! La sal puede ocultarse en cualquier producto. Sospeche de los enlatados, las picaderas, las sopas preparadas, productos cárnicos...
Aunque no lleve DASH de forma estricta, existen otras medidas que puede aplicar.
Consuma frutas frescas y vegetales. Al menos cinco raciones por día.
Frutas y vegetales ayudarán a mantener saludables sus arterias. Enfóquese especialmente en guineos, papas, melón cantalupe, ciruelas y pasas, por su contenido en potasio. Este mineral ayuda a mantener el balance de sal y fluido corporal en las medidas correctas. Si logra aumentar su consumo de potasio al mismo tiempo que reduce la sal, los resultados serán mucho mejores.
Dígale sí a la soya: Los que consumen soya o algunos de sus familiares (habichuelas, legumbres, nueces, semillas) tienden a tener valores mucho menores de presión arterial que aquellos que obtienen sus proteínas de fuentes animales, como las carnes.
Tómele cariño a la avena: deje de considerarla comida para niños y comience su día con una buena taza. Fría o caliente, como más le guste. La avena tiene una habilidad especial para reducir la hipertensión y los niveles de colesterol y sus maravillas siguen sorprendiendo a los científicos.
Limite el alcohol. Casi todos los " buenos" consumidores de alcohol son hipertensos. Si su médico todavía no se lo ha prohibido, limite su consumo alcohólico a un trago por día si es mujer y a dos, si es hombre. Un trago equivale a 12 onzas de cerveza, 5 onzas de vino o media onza de whisky. ¡No más!
Amor por el chocolate. No todas son malas noticias... aún puede comer chocolate. Una barra pequeña de chocolate negro, rico en flavonoides y antioxidantes que reducen la hipertensión. No se lleve del gusto a chocolate amargo (perdón por la ironía, no puedo evitarlo...), porque engorda!
Otras medidas complementarias incluyen ejercitarse al menos tres veces por semana, media hora cada vez; conseguir la compañía de una mascota, aprender a meditar, practicar un hobby y buscar la forma de limitar el estrés en su vida.
Seguro que a este punto ha identificado algunos factores que lo están afectando. Una lectura de presión arterial a tiempo puede salvar su vida o mejorarla. Qué está esperando?
Para mayor información sobre el DASH, consulte en www.nhlbi.nih.gov/health/public/heart/hbp/dash himilcetejada@hotmail.com
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